Nada me faltará…
“Jehová es mi pastor; nada me faltará.” (Salmos 23:1, RVR60)
A veces las palabras más sencillas traen las promesas más profundas.
Es maravilloso conocer a un Dios tan atento. Es alentador saber que es tan generoso. Es consolador descansar en Él en medio de lo que sea.
Procuro hacer conciencia de que cada dádiva divina me llega con una misma condicionante: "a pesar de mi.” No hay nada innato en mí que merezca su favor; no tengo con qué compensar su bondad; y nunca tengo por qué reclamarlo.
Así que, no importa medir la profundidad del valle que atravieso tanto como recordar que él estará conmigo.
A nivel pastoral, preocupa tener ovejas que realmente no sean del rebaño de Jesús. Parece que quieren lo que Dios ofrece, pero es evidente que no se someten al Pastor. Jehová es tu Pastor solamente si Jesús es tu Señor. ¿Te has entregado al Señor Jesús?